Continuación... "Reportaje sobre Transgénicos (INTA)"...
(...continuación...)
Impacto:
Pero todo esto, que sin duda es un avance que nos permite mirar con optimismo el problema alimentario desde el punto de vista del agotamiento de los recursos, no es la panacea. El impacto social y humano que conlleva debe ser analizado tan minuciosamente como lo es el impacto biológico y medioambiental.
La eficiencia agrícola impuesta desde el laboratorio, puede terminar con la economía de un país o de una región entera; acabar con culturas completas; destruir la biodiversidad alterando el equilibrio ecológico y generando una catástrofe de proporciones. ¡La solución no es dejar de hacerlo, sino hacerlo de manera cuidadosa y reflexiva, transparente y teniendo siempre como meta el mejoramiento de las condiciones de vida de la humanidad, y no sólo el aspecto comercial!, señala el Dr. Uauy.
"Si tomo el material genético de la proteína de una bacteria que es capaz de destruir los herbicidas, y se lo pongo a la soja, lo hago resistente a los herbicidas y obtengo una primera ganancia vendiendo esta semilla. El agricultor puede así cultivar soja, desmalezar con herbicida que no afecta a la planta de la semilla transgénica y ¡ahorrarse el gasto de pagar salario a todos los campesinos que realizaban la labor de desmalezar a mano!", explica.
En esta cadena, si bien el productor de semilla y el agricultor ganan ¿Quién paga el impacto socioeconómico de la desocupación campesina?
Teoricamente podríamos introducir el gen que produce el sabor y el aroma de la vainilla en un poroto, obteniendo de allí, el producto de vainilla que hoy tenemos que importar de Madagascar. ¿Pero que sucede con la economía de esa nación que vive de la exportación de vainilla?, se pregunta el Dr. Uauy. ¡Esta es una óptica que no puede perderse en el análisis del tema que hoy es contemplado sólo como una maravilla biológica!, agrega.
Riesgo:
En el laboratorio podemos hacer que las cosas mejoren o empeoren, explica en Dr. Uauy. "Por ejemplo, el ácido fítico que contienen los cereales dificulta la absorción del hierro y el zinc. Modificando genéticamente el producto, podemos obtener un cereal con bajo contenido de ácido fítico, logrando que los cereales se transformen en una buena fuente de hierro y zinc".
De aquí surge la primera norma en esta materia: los alimentos procesados o producidos por OGM deben ser equivalentes a lo que existía antes.
Por otra parte, algunos de los riesgos que los OGM implican para la salud humana ya han quedado de manifiesto. "Al modificar una proteína, uno puede hacer que una persona que no era alérgica a determinado producto, se vuelva alérgica cuando este es modificado. Si, por ejemplo, se le introduce el gen a una papa para que no la ataque cierta plaga, puede suceder que alguna gente tenga alergia a esta papa modificada, aunque anteriormente era consumidor del producto sin problemas", explica el Dr.
Esta es la segunda norma para los OGM: no deben provocar reacciones alérgicas que antes no existían.
Una tercera norma dice relación con el intercambio natural de las bacterias que hay en determinado medio. Dicho intercambio no debe interrumpirse. ¡Las bacterias de un yogurt vivo, por ejemplo, deben seguir interactuando con las bacterias normales del intestino. Si dicho intercambio se pierde, puede alterarse riesgosamente la reacción del organismo ante determinados antibióticos u otros agentes benéficos para la salud!
Este mismo riesgo corren las especies. La propia soja resistente al herbicida, por ejemplo, podría trasnferir, por simple polinización, dicha característica genética a alguna maleza haciéndola también resistente al herbicida, hecho que no ha ocurrido.
Esto pone de relieve el tema básico de la seguridad biológica de los OGM.
Los Dueños:
El problema de quién es dueño y maneja estas biotecnologías es un tema de especial relevancia. "La compañía que descubre y desarrolla determinados procedimientos para optimizar la producción, lucha por imponer su método y su producto, y cuando eventualmente lo logra, maneja el precio a su antojo. Así, el usuario del producto se transforma en su empleado; la agricultura se masifica y el pequeño agricultor, el agricultor más pobre, termina siendo desplazado, reproduciéndose así, en la base misma, la brecha entre pobres y ricos"
Será esta dimensión socioeconómica y la percepción pública sobre este tema, lo que determinará el uso de estas sofisticadas tecnologías. Porque todos los que se sienten potencialmente amenazados van a poner énfasis en los riesgos, mientras que la industria y los productores sólo destacarán los beneficios.
Lo importante es tener una permanente actitud científica frente a estas nuevas tecnologías que se presentan como una maravilla, pero de cuyas consecuencias en el organismo humano y en el medioambiente no sabemos lo suficiente.
Impacto:
Pero todo esto, que sin duda es un avance que nos permite mirar con optimismo el problema alimentario desde el punto de vista del agotamiento de los recursos, no es la panacea. El impacto social y humano que conlleva debe ser analizado tan minuciosamente como lo es el impacto biológico y medioambiental.
La eficiencia agrícola impuesta desde el laboratorio, puede terminar con la economía de un país o de una región entera; acabar con culturas completas; destruir la biodiversidad alterando el equilibrio ecológico y generando una catástrofe de proporciones. ¡La solución no es dejar de hacerlo, sino hacerlo de manera cuidadosa y reflexiva, transparente y teniendo siempre como meta el mejoramiento de las condiciones de vida de la humanidad, y no sólo el aspecto comercial!, señala el Dr. Uauy.
"Si tomo el material genético de la proteína de una bacteria que es capaz de destruir los herbicidas, y se lo pongo a la soja, lo hago resistente a los herbicidas y obtengo una primera ganancia vendiendo esta semilla. El agricultor puede así cultivar soja, desmalezar con herbicida que no afecta a la planta de la semilla transgénica y ¡ahorrarse el gasto de pagar salario a todos los campesinos que realizaban la labor de desmalezar a mano!", explica.
En esta cadena, si bien el productor de semilla y el agricultor ganan ¿Quién paga el impacto socioeconómico de la desocupación campesina?
Teoricamente podríamos introducir el gen que produce el sabor y el aroma de la vainilla en un poroto, obteniendo de allí, el producto de vainilla que hoy tenemos que importar de Madagascar. ¿Pero que sucede con la economía de esa nación que vive de la exportación de vainilla?, se pregunta el Dr. Uauy. ¡Esta es una óptica que no puede perderse en el análisis del tema que hoy es contemplado sólo como una maravilla biológica!, agrega.
Riesgo:
En el laboratorio podemos hacer que las cosas mejoren o empeoren, explica en Dr. Uauy. "Por ejemplo, el ácido fítico que contienen los cereales dificulta la absorción del hierro y el zinc. Modificando genéticamente el producto, podemos obtener un cereal con bajo contenido de ácido fítico, logrando que los cereales se transformen en una buena fuente de hierro y zinc".
De aquí surge la primera norma en esta materia: los alimentos procesados o producidos por OGM deben ser equivalentes a lo que existía antes.
Por otra parte, algunos de los riesgos que los OGM implican para la salud humana ya han quedado de manifiesto. "Al modificar una proteína, uno puede hacer que una persona que no era alérgica a determinado producto, se vuelva alérgica cuando este es modificado. Si, por ejemplo, se le introduce el gen a una papa para que no la ataque cierta plaga, puede suceder que alguna gente tenga alergia a esta papa modificada, aunque anteriormente era consumidor del producto sin problemas", explica el Dr.
Esta es la segunda norma para los OGM: no deben provocar reacciones alérgicas que antes no existían.
Una tercera norma dice relación con el intercambio natural de las bacterias que hay en determinado medio. Dicho intercambio no debe interrumpirse. ¡Las bacterias de un yogurt vivo, por ejemplo, deben seguir interactuando con las bacterias normales del intestino. Si dicho intercambio se pierde, puede alterarse riesgosamente la reacción del organismo ante determinados antibióticos u otros agentes benéficos para la salud!
Este mismo riesgo corren las especies. La propia soja resistente al herbicida, por ejemplo, podría trasnferir, por simple polinización, dicha característica genética a alguna maleza haciéndola también resistente al herbicida, hecho que no ha ocurrido.
Esto pone de relieve el tema básico de la seguridad biológica de los OGM.
Los Dueños:
El problema de quién es dueño y maneja estas biotecnologías es un tema de especial relevancia. "La compañía que descubre y desarrolla determinados procedimientos para optimizar la producción, lucha por imponer su método y su producto, y cuando eventualmente lo logra, maneja el precio a su antojo. Así, el usuario del producto se transforma en su empleado; la agricultura se masifica y el pequeño agricultor, el agricultor más pobre, termina siendo desplazado, reproduciéndose así, en la base misma, la brecha entre pobres y ricos"
Será esta dimensión socioeconómica y la percepción pública sobre este tema, lo que determinará el uso de estas sofisticadas tecnologías. Porque todos los que se sienten potencialmente amenazados van a poner énfasis en los riesgos, mientras que la industria y los productores sólo destacarán los beneficios.
Lo importante es tener una permanente actitud científica frente a estas nuevas tecnologías que se presentan como una maravilla, pero de cuyas consecuencias en el organismo humano y en el medioambiente no sabemos lo suficiente.
Etiquetas: Alimentación
2 Comments:
he publicados varios libros.. y he ganado varios premios importantes... si vas por una librería, pregunta por algún libro mío, en una de esas...
un abrazo,
bastante interesante el tema que tocaste, dan ganas de no comer más
By roberto fuentes, at 23:42
Jajajaja.... es un poco drástica tu opinion... jeje, me dio risa..
Yo kreo ke basta con preferir productos orgánicos... =) y invocar la conciencia
Que interesante sería encontrar un libro tuyo por ahi...
Vamos a preguntar algún día..
=)
Saludos!
By Kalabaza, at 17:08
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